Isabel Montalbán, una chica de ciudad, se traslada al pueblo en el que viven los padres y los dos hermanos de Aníbal Otero, su marido. Sin embargo, nadie sabe que la presencia de la joven en esa casa está a punto de cambiar el destino de toda la familia… para siempre.
Isabel está recién casada con Aníbal Otero, un joven hombre de negocios, emprendedor y ambicioso, y ella es dueña de una pequeña, pero prometedora empresa de banquetes. La vida parecería sonreírle a Isabel… si no fuera por una molesta tos.
Sus ya graves problemas respiratorios se han ido agravando durante los últimos tiempos por culpa de la contaminación de la ciudad. Las consecuencias para su salud pueden ser fatales si no pone remedio pronto. Lo que ella necesita ahora es tranquilidad y respirar aire puro. Para su sorpresa, Aníbal encuentra la solución perfecta, ya que su familia es dueña de una prestigiada clínica en lo alto de las montañas. Isabel queda deslumbrada por la impactante belleza del paisaje, dominado por amplios y frondosos bosques, así como tranquilos lagos de agua fresca.
Pero Isabel no contaba con que tendría que permanecer ahí durante tanto tiempo, pues los numerosos negocios de su marido lo mantienen retenido en la ciudad por largas temporadas. Isabel tiene que aprender a adaptarse a su nueva vida y a convivir con su “nueva” familia política: Don Arturo, un hombre amable y cariñoso y, su suegra Doña Amparo, una mujer celosa y controladora, pero lo que realmente provoca una súbita incomodidad para ella es la presencia de Sergio y Daniel, sus cuñados.
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